La Due Diligence o Auditoría de compra, es una herramienta de negocios muy importante para el comprador o inversionista, en el momento en que desea vincularse financieramente con otra entidad ya sea por fusión, asociación, créditos comerciales o sencillamente la adquisición de otra entidad.
El Iceberg y los Negocios.
Sin embargo, en los negocios se debe tener mucho cuidado de no ver las cosas a la ligera, y como lo dice el título de este artículo, hay que ver exactamente que se trata de un “Iceberg”, del cual sabemos que flota en mar abierto y solo es observable un octavo por encima del agua, por lo que es difícil conocer y juzgar su verdadero tamaño.
La cosa se vuelve mas grave ya que el iceberg en sus bases, puede estar agrietado y la grieta a simple vista es difícil observarla por lo que pararse en el iceberg se corre el riesgo de desmoronarse y caer.
Es lo mismo con las empresas. La verdad que una empresa puede parecer muy bien gestionada desde el exterior pero en su interior puede tener graves problemas internos que puedan poner en riesgo nuestra relación comercial y nuestra inversión.
No debemos dejarnos llevar por la buena imagen y reputación, o que las presentaciones están en papel lino, esto no quiere decir que sea un excelente cliente o una buena oferta, si no mas bien es necesario enfocarse en un estudio diligente y adecuado para lograr sentarnos en tierra firme.
Actuando Diligentemente.
En este momento es cuando entra en juego “Due Diligence”, ya que debe tenerse un verdadero análisis probatorio de la empresa tanto en sus datos internos como en su situación jurídica, analizando también su historial crediticio y una adecuada confirmación de saldos con sus acreedores actuales.
El análisis de su estado crediticio le dirá que tan riesgoso es invertir con esa empresa, incluso si la empresa tiene un buen récord crediticio, es recomendable ver su historial y tener en cuenta sus atrasos e incumplimientos en pagos de deudas pasadas. Hay ocasiones que en los negocios existen buenas razones para retrasar pagos, asi que también no dude en preguntar el por que de esos atrasos.
Este análisis además debe de tener un estudio de los libros de la empresa, asi como de sus estados Financieros, reportes, informes de abogados, detalle de los rubros del negocio, obtención de datos por medio de compulsas a clientes, proveedores, bancos y contratos firmados por la compañía entre otros documentos.
La pregunta que no debe faltarte: ¿Qué futuro tiene el negocio?
Una vez que haya comprobado que el iceberg es sólido, no asuma que va a ser sólido para siempre, reconozca que un negocio es una cosa viva y que si nos olvidamos de alimentarlo, es decir creemos que solo es de «configurar» y no dar mantenimiento, estaremos muy equivocados. El entorno de una empresa es cambiante, por lo tanto tiene que estar pendiente de los cambios externos, saber observar este entorno si tendrá algún efecto al negocio.
En las próximas publicaciones haremos un detalle mas grande de la “Due Diligence”, sin embargo espero que logres también hacerte un panorama del océano saturado de Icebergs que debes navegar, y solo tu eres el que puede lograr el éxito por medio de una verdadera diligencia en tus acciones.