Las opciones binarias son una forma sencilla de comerciar en base a las fluctuaciones de los precios en diferentes mercados globales. Como contrapartida de su sencillez, encierran riesgos que es necesario tener en cuenta por los comerciantes.
Las opciones binarias digitales dan acceso a mercaderías, índices, acciones y monedas extranjeras. Son también conocidas como opciones de retorno fijo, ya que las opciones tienen una fecha de caducidad. Cuando se invierte en la dirección correcta del mercado, recibe un pago fijo, sin importar cuánto fue la variación ocurrida. Por contrario cuando el movimiento va en la dirección opuesta, se pierde en la inversión también una cantidad fija de la misma.
Por supuesto que el pago recibido depende de la cantidad invertida, por eso comerciantes que han hecho diferentes inversiones en una misma opción, en un mismo período, pueden recibir pagos diferentes.
La cantidad a invertir varía según las compañías corredoras. Generalmente se exige un mínimo de 10 dólares y se permite un máximo de 10.000. Cada corredor especifica sus reglas en cuanto a precios. Comúnmente el comerciante no puede retirar su dinero con anterioridad a la finalización del período prestablecido.
Las opciones binarias digitales suelen ofrecerse en una gran variedad de períodos de tiempo, pudiendo ser incluso minutos o meses. También con todo tipo de precios, por lo que quien quiera comerciar con ellas no encontrará ningún problema.
La principal ventaja de este tipo de inversiones es que el riesgo y la ganancia posible son conocidos con anterioridad. No importa cuánto se mueva el mercado, siempre tendremos dos opciones conocidas de antemano. Son operaciones simples de realizar y generalmente los corredores no cobran comisiones por hacerlo. Además los comerciantes pueden acceder a una gran variedad de bienes en mercados de todo el mundo.