Como tú o como cualquier humano, cometí muchos errores por pensar que mi problema de dinero era exactamente eso: un problema financiero, cosa más equivocada que también cometía al asesorar a algunos clientes de esa misma forma. El Resultado era pobre y estaba más que claro que yo estaba en un enfoque equivocado.
Pero logré alcanzar un gran avance cuando me di cuenta que las personas más ricas tenían actitudes y comportamientos opuestos a los míos y a los de mis clientes. Los más acaudalados ven su situación financiera desde una posición de auto-responsabilidad, mientras que la deuda para mí y para mis clientes éramos simples víctimas de las finanzas.
De las características más importantes a destacar para enfrentar tus problemas de deuda los debes sacar de los mejores en la administración del dinero, es por eso que identifico dos pilares que generalmente caracterizan a las personas de mayores recursos en el éxito de su dinero.
- Planificar sus finanzas. Básico, pero ni yo ni mis clientes teníamos identificado algún plan de nuestras finanzas, deambulábamos sin rumbo definido y eso hacía que no tuviéramos tampoco estrategias de desarrollo.
- Organiza tus planes en torno a una gratificación retrasada. ¿Qué significa esto? Que los planes deben organizarse en torno a resultados, generalmente cuando uno está en una situación de deuda esperamos una gratificación instantánea y casi milagrosa.
En sólo 2 ejemplos de una larga lista de rasgos opuestos a los que utilizaba, podemos visualizar muchas cosas. Estas son pautas o tendencias que generalmente son Reales. Si bien puede haber una variación personal, en general, los patrones son inconfundibles. Estas actitudes son básicas para organizar tu vida económica.
Sorprendentemente, cuando me presenté estos principios, mentalizarme en un entrenamiento más que en acciones específicas financieras me dieron una solución de deuda real que resolveré con el tiempo.
Esto es obvio cuando se piensa en ello. El resultado de las decisiones financieras diarias depende de tus hábitos y actitudes que impulsan esas decisiones. Por ejemplo, considera las siguientes opciones y sus consecuencias financieras evidentes:
¿Compras cafés de lujo durante todo el día o te haces de un bote de tu café favorito y te lo llevas contigo?
¿Compras un coche nuevo cada pocos años o mantienes tu auto usado confiable?
¿Cenas fuera con frecuencia o cocinas comidas saludables en casa?
¿Eres un minimalista o deseas la última moda?
¿Compras a conseguir lo que necesitas o te compras para el placer y la recreación?
Cuando te enfocas en soluciones financieras, tratas el síntoma en lugar de la causa. Cuando te enfocas en tus actitudes y hábitos te centras en la causa y el síntoma se hace cargo de sí misma automáticamente sin ningún tipo de auto-disciplina.
Quiero ser claro – esto no es una solución rápida. Los resultados que se producen a partir de este enfoque se producirán gradualmente con el tiempo. Del mismo modo que se tomó el tiempo para acumular la deuda, se necesita tiempo para trabajar por causas profundas.
Sin embargo, las soluciones son tan permanentes como las nuevas actitudes y hábitos que se adoptan – y eso hace toda la diferencia. La verdad es que los resultados financieros de tu vida no dependen de la cantidad de dinero que ganas. En su lugar, dependen de lo bien que manejes el dinero que ya tienes.